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  • Foto del escritorNatalia Vispo

POTASIO GOURMET

Si hay un tema que se viene discutiendo desde el siglo pasado es "qué es arte" (y qué no).

A partir del surgimiento de algunas vanguardias que jugaron a ser el antiarte, como es el caso del dadaísmo por ejemplo, que inventó el juego del cadáver exquisito como forma de poesía, ✍🏼 llegamos a la conclusión de que el concepto de canon artístico que existía desde hacía mucho tiempo atrás, estaba cambiando. Arte no significaba ya representar algo tal cual como era en la realidad. Y hasta las obras dadaístas que durante la década de 1910 se habían jactado de no ser artísticas, terminaron en un museo, 🏛️ como es el caso de la “Fuente” de Duchamp, expuesta hoy en el Museo Nacional de arte de Catalunya.

👉🏻También habrán escuchado hablar alguna vez del llamado arte conceptual, que engloba ciertas acciones, performances, instalaciones y demás "experiencias", que casi automáticamente son interpretadas por el público como arte a partir de la reacción que despiertan en ellxs mismxs. Pero claro está, (SPOILER ALERT) que este momento en que traigo un ejemplo a la mesa, todxs nos indignamos.


En 2019 el artista italiano Maurizio Cattelan inaugura su obra titulada Comediante, obra que consistía en una banana pegada con cinta adhesiva a la pared. Claramente (y si queremos filosofar nos preguntaremos por qué "claramente"), esto despertó muchísima polémica.

Se trata de una obra de arte contemporáneo que logró venderse dos veces en la feria artística Art Basel de Miami, por nada más ni nada menos que 120.000 dólares. Sí, CIENTO VEINTE MIL DÓLARES!! 🤑


👉🏻

Pero lo interesante no quedó ahí. Al tiempo, en su visita a la exposición, el artista plástico David Datuna, quitó descaradamente la banana de su lugar, la peló y se la comió así, como quien no quiere la cosa frente a lxs espectadores. Tratando de esquivar al personal de seguridad, alegó estar realizando una "performance" titulada "artista hambriento".

“¡Nos vemos después de la cárcel, chicos!”, dijo Datuna ..."realmente me encanta esta instalación. Es muy deliciosa”, agregó mientras era expulsado de la galería.

Pero muchachxs no se alarmen que tuvo un final feliz. Luego del episodio se reforzó el personal de seguridad para que vigilara la nueva banana que reemplazaría a la anterior, y se procedió a la colocación de una cuerda de seguridad para ordenar al público que quisiera tomarse unas selfies junto a la banana en cuestión.


Fuente: france24.com

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